Lo veo como una alegoría del capitalismo más despiadado. Parece uno de los motivos (ironía incluida) por el que hayan seleccionado a Willy Toledo para hacer de policía que se pierde en esos entresijos.
Por lo demás, de acuerdo con la crítica y con la idea de que los actores principales cumplen muy bien su papel, excepto Marta Belmonte que me parece manifiestamente mejorable.